¿Qué es?
The Joker es la última versión del villano de Batman, protagonizada por Joaquín Phoenix y que en Chile se estrenó días antes del 18 de octubre de 209, casi una premonición. La película recorre los hechos que terminan gatillando que Arthur Fleck se convierta en “The Joker”. Dirigida por Todd Phillips, muestra a un personaje de frágil salud mental, al que la pobreza, la soledad y la violencia de su ciudad, lo terminan afectando profundamente.
¿Por qué verla?
The Joker no es solo una película de comics, tampoco sólo la versión solista de un personaje secundario de Batman, es una excusa perfecta para adentrarse en los efectos del dolor y la violencia en la vida de las personas. Joaquín Phoenix interpreta a un hombre enfermo, del que la sociedad no se puede hacer cargo, que mas bien lo convierte en un personaje raro, un payaso sin historia. La violencia de una sociedad que segrega a quien no encaja en los cánones de éxito y progreso, comienzan a hacer mella en Arthur, cuy vida se va oscureciendo. Su problema de salud mental no es debilidad, capricho o una opción para llamar la atención, es el resultado de un modo de vida que no le deja espacio para respirar y que lo ha condenado al abandono. Su respuesta es la violencia, pero es eso, una respuesta, una que no queremos, pero que es la esperable cuando toda tu vida ha sido sentirte invisible para la sociedad.
¿Qué mensaje de Dios nos transmite?
Primero, que todo lo que ocurre a nuestro alrededor nos afecta. Que la soledad, la pobreza, la marginación, afectan el alma y rompen algo de nuestra fibra humana. Cuando Jesús sana al leproso, no sólo sana su cuerpo, reconstruye su alma. Porque no sólo lo sana, le permite disfrutar de la cercanía de su familia, que se le había prohibido por ser leproso. Porque lo reintegra a la comunidad, de la que estaba excluido por ser impuro. La salud mental es la salud del alma. La tristeza mata el corazón y nuestra psiquis lo resiente.
Por eso la violencia de todo tipo atenta contra nuestra salud mental, también la marginación social, la invisibilizacion. Todo eso rompe nuestro equilibrio y nos hace presa de la depresión o de otras afecciones de la psiquis. Por eso, la justicia también es importante para la salud mental, sobre todo, cuando lo que se necesita es un trato justo de la enfermedad.
Por: Miguel Jesús Pedreros sj.
Comments